Estaremos de acuerdo en que,
excepto en algunas pocas ocasiones, los productos no crean disrupción en sus
mercados, son en su mayoría innovaciones incrementales, que por ello ganan
terreno ofreciendo al cliente algo más o mejor, mereciendo su reconocimiento y
resultados. Por otra parte, la excepcional introducción de productos
disruptivos que pretenden romper y alcanzar mayores logros, en muchas ocasiones
se encuentran con mercados que no están preparados, o el avance es casi inalcanzable
económicamente, o simplemente satisface necesidades latentes todavía no
expresadas, lo cual requerirá tiempo o una lucha titánica.
Las conquistas con innovaciones
incrementales logran avances, en algunas ocasiones sobrevivir, o incluso
desmarcarse en una breve ventana temporal. En cualquier caso, disrupción o
innovación incremental, necesitan competir, conquistar market share, share of
voice, y generar fundamentalmente margen.
En ambos casos necesitamos “pegar
fuerte”, desde todos los frentes, dirección, estrategias, marketing, finanzas,
operaciones, ventas, comunicación, distribución, internacionalizaciones, y cómo
no formación.
Pero, ¿qué es “pegar fuerte”?, se
sobreentiende, pero esforcémonos en definirlo.
Podría significar, ¿qué todos
vibran por conseguir los objetivos?, qué todos ponen su inteligencia y sus
talentos en el proyecto?, ¿qué todos luchan y se comprometen como si fueran
equipos de alto rendimiento superando las marcas nunca alcanzadas?. Seguro que
coincidimos con estas palabras u otras, pero siempre necesitamos esos altos
niveles del esfuerzo de las personas.
¡Aquí quería llegar!. Personas,
esfuerzos y talentos, el formidable cóctel en el que quizá se pueda aplicar una auténtica
innovación: The Big Innovation, un liderazgo movilizador!
La innovación, no está sólo en el
producto, sino y quizá fundamentalmente en un liderazgo 2020, en el que los
equipos se mueven porqué están orientados, motivados, involucrados porque saben
que “vale la pena” (Ver Vectores de Motivación), porque conocen su misión, comparten una visión
esperanzadora.
El otro día me comentaban, en una
reunión un COO decía quiero “voluntarios”, con el sentido de gente luchadora
que tiene la fuerza de trabajar muy y muy fuerte.
Excitante!, el voluntario está
dispuesto a luchar por nada, piensan algunos. NO ¡!!, el voluntario tiene una
razón, una misión, un para qué y porqué, y seguramente esas razones tienen
elementos trascendentes. El liderazgo debe reflexionar en ese aspecto, no esperar sólo el vector intrínseco de la motivación individual que moverá sólo individuos hacia direcciones quizá contrapuestas.
Directivos y Líderes !!!, aquí está la innovación
que dará al producto disruptivo la seguridad de alcanzar el Olimpo, o con otros
productos innovadores avanzar con la dignidad que merece.
¡La innovación
es LIDERAZGO!, la revolución es crear equipos con una misión. Una visión que
les una. Reciente leía que en los equipos de proyectos hay que cuestionar
periódicamente el porque están haciendo las cosas.
Un amigo y Dir.
Gral. siempre me dice liderazgo es mover….
HR y estudiosos
del talento, rápido y sin perder tiempo, ¡actuad!, en las posiciones de dirección
y liderazgo garantizad personas que pueden, quieren y saben mover.
Hoy los
empleados más jóvenes (generaciones Einstein, Y,...) o en general todos colaboradores se mueven, si comparten (sienten equipo), si comprenden (tienen visión), si ven que les vale la pena (aprenden y ganan), o incluso participan de algo grande, entonces sí serán voluntarios!!!.
El liderazgo
necesita revisión, pues es la clave de la auténtica innovación.
Liderazgo
puede transformar una innovación incremental en poderosa disrupción, y el
producto disruptivo en un gran acontecimiento.
Os propongo una profunda revisión
de vuestra dirección, ¿hay liderazgo en la función?
Suerte, el 2020 está aquí muy
cerca y sobre todo para las generaciones que se están introduciendo cargadas de
capacidades que sólo se pondrán al servicio de proyectos con sentido.
Un consejo, en mi humilde modo de
ver. Humildad, confianza, compromiso, transparencia, valores sociales y
medioambientales, 2.0 o más, y mucha pasión, si tus directivos no respiran esta
fragancia hay que provocar cambios.
Hoy desde 30.000 pies sobre las
Azores ya puedo enviar whastapp y correos, todos comunicados, hoy la falta de
comunicación no se puede entender, por cierto estimado líder incluye en tus habilidades ser 2.0 no sólo como usuario sino en tus
planteamientos de negocio.
Eudald Parera
Interesante reflexión, Eudald. Necesitamos liderar con visión, inspiración e integridad, como propone el modelo EFQM. Sostener lo que ya funciona, mejorar e innovar sistemáticamente. Abrir caminos, construir futuro.
ResponderEliminarComparto esta idea y visión para optimizar y mejorar en lo posible el liderazgo del 2020.Ello no se llevaría a cabo sin una capacidad de mover / movilizar los sentimientos, las emociones y las acciones de todo líder para dar sentido a todo lo que hacemos.
ResponderEliminarDesde el coaching como herramienta de trabajo y desarrollo, contamos con metodologías como el Neuro Training Lab que partiendo de los principios de la neurociencia y del neuroaprendizaje, permite observar y obtener una visión holística de los procesos observados en los participantes. También el método EQ-I 2.0 nos permite mejorar la autconsciencia emocional de todo líder que quiera o esté dispuesto a cambiar algunos parámetros de su actitud hacia su entorno. En cualquier caso, toda reflexión que suponga una innovación incremental, será bien venida en todo comportamiento personal y empresarial.
Solo existe un ejercicio de liderazgo, los que somos padres de familia lo sabemos bien , el difícil equilibrio entre exigencia y comprensión. Así pues yo creo que no existe una técnica de motivación como respuesta de adhesión gozosa sino las personas , como tu dices Eudald, que tienen que ser autenticas , esas son las que arrastran de forma inmediata , tener amor a lo que hacen , respeto y humildad.
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